Un taller ciclista en tu casa ¿Qué debes tener?

¿Cansado de ir al taller? ¿Te gusta hacer las cosas por tu cuenta? Sin problema, te contamos qué necesitas para montarte tu propio taller en casa y que tengas la bici en perfectas condiciones siempre sin pasarte de herramientas, con lo justo y necesario.
Si usamos con asiduidad la bici, tarde o temprano tendremos que hacer alguna que otra reparación. O un retoque al menos. Y hay que estar listo para reparar un pinchazo, ajustar y corregir la holgura de la horquilla o la dirección, arreglar la rotura de la cadena o variar la altura del sillín.
Esas son las cosas más típicas, pero si quieres meterte un poco más en el mundo de la mecánica quizá tengas que repensar un poco tu garaje y empezar a enumerar qué herramientas vas a necesitar tener siempre disponibles.
Potro de taller
No es que sea imprescindible, pero lo vas a agradecer, créenos. Se trata de tener la bicicleta elevada para poder ajustar con tranquilidad y sin esfuerzo los cambios o los frenos, así como cualquier otro retoque en neumáticos o ruedas.
Si no tienes mucho espacio, será suficiente con un expositor de tienda que eleve la rueda trasera sosteniendo la bicicleta por las vainas.
Herramientas básicas pero no específicamente ciclistas
Puede que tengas ya muchas de ellas, pero las que necesitarás en la bici son unas cuantas. Para empezar, destornilladores, tanto planos como de estrella. Con comprar uno pequeño, otro mediano y uno un poco más grande, tendrás suficiente.
También es básico tener un buen juego de llaves allen. Las medidas más usadas en nuestras bicicletas van desde 1,5mm a 10mm, así como un combo de llaves para apretar tornillos con cabeza tipo torx, muy usados en diferentes piezas y componentes, por ejemplo en los frenos de disco. Las medidas más usadas son las de 10, 15, 20, 25 y 30mm.
Un capricho: la llave dinamométrica, que no es imprescindible pero sí muy aconsejable, ya que te permitirá ajustar exactamente a la presión, en Nm, que pide cada una de las piezas (el nivel perfecto para cada pieza suele estar escrito junto al tornillo, tanto en el manillar como en la tija del sillín, por ejemplo).
Herramientas específicas para bicicletas
Un tronchacadenas es muy útil. Aprovecha para comprarte uno bueno, aunque pese un poco más, ya que estamos hablando de una herramienta para tenerla siempre en casa. Si seguimos hablando de cadenas, es imprescindible que tengas pines y eslabones rápidos bien a mano, así como un alicate de eslabones. No es que no puedas usar los alicates normales, pero con uno específico te resultará pan comido. Rematamos esta parte proponiéndote que te hagas con un medidor del desgaste de cadenas, una herramienta muy barata que te evitará la tediosa labor de controlar por otros medios (poco fiables) si tu cadena necesita ser cambiada o no.
En la parte de las bielas y el pedalier hay también muchas cosas a tener en cuenta. Lo primero es saber exactamente qué pedalier estás usando, porque cada uno tiene su propia herramienta. Si es de cartucho o de cazoletas externas, necesitarás, valga la redundancia, una llave de cazoletas. Los pedalieres que van por presión, también tienen su propia herramienta, y, por último, para las bielas de rosca, necesitas un extractor de bielas.
Para el cassette de cambio trasero te vendrá bien tener un extractor, no sólo para sustituirlo cuando esté gastado y hayas comprado un nuevo, por supuesto, sino para poder limpiarlo bien tras una de esas rutas en las que acabas de barro hasta arriba. Hay mucha suciedad que no podrás quitar con un simple manguerazo.
Para los ajustes de los conos, responsables de que las ruedas no bailen y giren perfectamente sin ruidos, vas a necesitar un par de llaves de conos. Decimos dos porque hay un cono interior y hay un cono exterior. Si no tienes ambas, no podrás ajustarlo con precisión. Mira bien las medidas de tu buje antes de comprar las llaves, hay muchas diferentes y no queremos que tires el dinero.
Como estamos hablando de ruedas, una herramienta básica y muy barata es la llave de radios. Pequeña, circular y con varias medidas. Mira cuál es la tuya para acertar.
Para los neumáticos, lo que imaginas: desmontables, kit de reparación tubeless si es lo que usas, parches, cámaras de repuesto y una bomba de taller, claro.
¿Tienes suspensión? Pues una bomba especial de alta presión para suspensiones te va a venir de perlas. Es básica si quieres que la suspensión de tu bici esté ajustada con relación a tu peso. Te hará muy feliz llevarla bien calibrada cuando estés en plena ruta.
Alguna cosa más
Si vas a cambiar tú mismo los cables de freno y cambio, necesitarás un alicate que corte bien y que cuente con un pequeño apisonador para los cierres de los cables, esas cabecillas metálicas que rematan el final del cable para que no queden sueltas y puedan hacerte arañazos mientras pedaleas.
Y un martillo, pero no uno cualquiera, uno con cabeza de nylon, porque a veces hay que dar golpes, sí. Pero se trata de nuestra bici, así que un martillo de nylon es como una mano de hierro con guante de seda.
Por terminar, y si aún tienes presupuesto, hazte con unas tijeras, un cúter, bridas de diferentes tamaños y tornillería variada de repuesto, que no es muy cara y te sacará de algún apuro. Si además tienes algún que otro producto de limpieza específico para cadenas y discos, mejor que mejor.
Finalmente, te recomendamos que tengas cerca un bote con un poquito de grasa. Cualquier cosa que se mueva en la bici (pedales, dirección, bielas…) necesitará cada cierto tiempo un pequeño toque de lubricación.
Con todo eso vas a poder montar un buen taller en tu propia casa. Te recomendamos que, si lo consigues, no se lo digas a mucha gente, porque tendrás cola en la puerta con los vecinos y amigos que quieran pedirte algún ajuste.