
Con la llegada del otoño, muchos conductores optan por aparcar sus motocicletas y pasarse al coche. El frío, la lluvia y el viento acostumbran a convertir la conducción en una actividad desagradable cuando no se está preparado para las bajas temperaturas, pero con los accesorios y las prevenciones adecuadas, el otoño se convertirá en una estación más para disfrutar de la moto.
Accesorios propios de la motocicleta para el invierno
En muchos casos, el frío es el principal impedimento para disfrutar de una conducción segura y agradable, pero existen varios mecanismos, tanto de las propias motocicletas como accesorios externos, para evitarlo. Por ejemplo, en la motocicleta hay mecanismos de “calefacción” integrados como los puños y los asientos calefactables. Estos sistemas necesitan corriente eléctrica y habitualmente esta se consigue conectándolos a la batería de la moto, de modo que no precisan de baterías externas y funcionan siempre que la moto está encendida.
Los puños pueden activarse con un control que normalmente se coloca en el propio manillar y hace que los dos extremos del mismo, tanto el accionador del gas como el manillar izquierdo, emitan calor. Así, junto con el uso de guantes, se evita la pérdida de calor en las manos y se consigue que la temperatura no baje por la incidencia del aire y el frío al conducir.
El otro ejemplo, el asiento calefactable, funciona del mismo modo. Consiste en unas resistencias especiales colocadas en el interior del acolchado del asiento que emiten calor para que la zona que está en contacto con el asiento mantenga la temperatura. En este caso, los asientos calefactables sí que son algo más exclusivos de cada modelo de motocicleta, y eso podría provocar que haya más motos que no puedan optar a colocarlos.
Normalmente, tanto los puños como los asientos calefactables disponen de varias intensidades de calor que pueden controlarse cómodamente desde el manillar, pero eso dependerá del modelo elegido. La instalación es sencilla y puede llevarse a cabo en cualquier taller.
Accesorios externos para moto y frío
Más allá de los accesorios que pueden instalarse en la propia moto para generar calor, existen una serie de accesorios externos que también se pueden utilizar para conseguir paliar los efectos del frío y la lluvia. Un ejemplo claro son las mantas cubrepiernas. Estas mantas, típicas de las motocicletas escúter y utilizadas principalmente en la ciudad, pueden ir tanto atadas a la motocicleta como al conductor y protegen, con un tejido cálido y cortaviento, del aire que incide sobre la mitad inferior del cuerpo del conductor.
Las mantas permiten la total libertad del conductor y no impiden el gesto de sacar los pies por debajo para ser todavía más útiles en contextos urbanos. A este accesorio podemos sumar también los llamados cubremanetas, que son una especie de fundas para los puños de la motocicleta que cortan el aire e impiden que el frío baje demasiado la temperatura de las manos al conducir.
A pesar de que todos estos accesorios pueden evitar que los motoristas pasen frío en invierno, la principal forma de evitarlo será siempre una vestimenta adecuada. La ropa de moto específicamente diseñada para las bajas temperaturas suele llevar integrada un sistema de capas que hace que el viento no penetre en el cuerpo y que la temperatura corporal no baje de forma rápida. Además, existen cada vez más mecanismos internos en las chaquetas, como los chalecos calefactables, que emiten calor en la zona del torso y se recargan con baterías USB.
Está claro que el frío es un factor que no podemos eliminar del invierno, pero sí que hay muchas opciones para poder evitar que su aparición en escena nos quite las ganas de salir a disfrutar de la carretera.
Periodista desde 2016. Actualmente en la sección de deportes de El Periódico tras más de seis años de experiencia en redacción y contenidos audiovisuales para redes sociales con especial énfasis en deportes de motor y de contacto. Especialista en la actualidad del mundo de las motos, los coches, la competición y los retos actuales asociados a la movilidad. Ha colaborado con El Mundo, Betevé y revistas especializadas del sector del motor como Moto Taller. Colabora con el RACC desde 2023.

Begoña González de la Mora
Begoña González de la Mora és periodista especialitzada en motor i mobilitat, amb una sòlida trajectòria en mitjans de comunicació com El Periódico de Catalunya i col·laboracions destacades amb el RACC. La seva labor se centra en la divulgació tècnica i pràctica sobre el món de l'automòbil i les motocicletes, amb un enfocament clar, rigorós i orientat a l'usuari. Combina el seu coneixement del sector amb una forta presència digital, aportant contingut especialitzat i s'ha consolidat com una veu autoritzada en l'àmbit de la mobilitat i la seguretat viària.