ruta en moto transpirenaica

Recorrer los Pirineos en moto es una de las grandes aventuras que se pueden hacer en la península ibérica. Desde el Mediterráneo hasta el Cantábrico, la Transpirenaica atraviesa montañas, valles, pueblos con encanto y pasos de montaña espectaculares. Una ruta que combina carreteras con naturaleza salvaje, gastronomía local y cultura tanto española como francesa.
Partiendo desde el Cap de Creus, el punto más oriental de la península, y terminando en el Faro de Higuer, en Hondarribia, podrás vivir en cuatro días una de las rutas más completas y hermosas de Europa.

Punto de inicio de la Transpirenaica

La Transpirenaica puede hacerse en cualquiera de sus dos direcciones: desde el Mediterráneo hacia el Cantábrico o a la inversa. Sin embargo, la opción más habitual y simbólica es empezar en el Cap de Creus, donde el sol nace sobre el mar y marca el inicio perfecto de la aventura.
El cabo se encuentra junto al pueblo de Cadaqués, en la provincia de Girona. Antes de arrancar, merece la pena acercarse al faro, contemplar las vistas del Mediterráneo y hacerse la foto de salida junto al cartel del parque natural.

Seguridad durante la ruta en moto

Las carreteras pirenaicas son espectaculares, pero también exigentes: muchas son estrechas, con curvas enlazadas y cambios de altitud constantes. Es importante conducir con precaución, especialmente en pasos de montaña donde pueden aparecer animales o gravilla. El clima en los Pirineos cambia rápido: incluso en verano puedes encontrar niebla, viento o lluvias repentinas. Lleva siempre ropa impermeable y térmica. Por lo demás, tanto España como Francia son países muy seguros para viajar en moto y con buena asistencia en carretera.

Preparativos antes del viaje: ¿qué necesitas para la Transpirenaica?

La mejor época para recorrer la Transpirenaica es entre junio y septiembre, cuando los puertos de montaña están abiertos y el clima es más estable. Asegúrate de revisar la moto antes de salir: frenos, neumáticos y presión son esenciales para disfrutar con seguridad de las curvas. Lleva equipación completa con protecciones, guantes de verano e invierno, y una buena capa térmica para los tramos más altos. Se recomienda reservar alojamiento con antelación en los pueblos más pequeños, especialmente si viajas en julio o agosto. Con una buena asistencia como la del RACC, podrás circular tranquilo sabiendo que estarás cubierto ante cualquier imprevisto.
Recuerda llevar toda la documentación del vehículo, seguro internacional y tu DNI o pasaporte.

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Itinerario recomendado: 4 días en moto por la Transpirenaica

Día 1: Cap de Creus – Andorra

Comienza tu aventura en el punto más oriental de la península, el Cap de Creus, donde el mar Mediterráneo se une con las rocas del Parque Natural. Tras la foto de inicio junto al faro, dirígete hacia Cadaqués y El Port de la Selva, para enlazar después con la carretera GI-500 y GI-503 hasta Camprodon. Desde allí sube al espectacular Coll de la Creueta (1.921 m), uno de los puertos más panorámicos de los Pirineos orientales, con curvas suaves y vistas abiertas al valle de la Cerdanya. Cruza hacia La Molina y Puigcerdà, donde podrás hacer una pausa para comer, antes de continuar hacia La Seu d’Urgell y subir a Andorra.

La llegada al pequeño principado te recompensa con buenas carreteras, combustible económico y un sinfín de opciones para cenar o descansar.

Día 2: Andorra – Aínsa

Sal temprano de Andorra por el Coll de la Rabassa o el Port d’Envalira, el paso asfaltado más alto de los Pirineos (2.409 m). Desde allí desciende hacia La Seu d’Urgell y toma la N-260, conocida como la Carretera del Eje Pirenaico, uno de los tramos más disfrutables para motoristas de toda Europa.

El recorrido pasa por Sort, Gerri de la Sal y Pont de Suert, encadenando curvas perfectas y paisajes de alta montaña. Puedes desviarte brevemente hacia el Parque Nacional de Aigüestortes si deseas disfrutar de vistas alpinas. Antes de llegar a Aínsa, cruza el Puerto de Perves y el Coll de Faidella, carreteras solitarias y con asfalto impecable. Finaliza la jornada en Aínsa, un pueblo medieval precioso con una plaza central donde relajarte con una buena cena.

Día 3: Aínsa – Arreau (Francia)

Desde Aínsa, continúa por la N-260 hacia el Puerto de Cotefablo y Biescas. Desde allí asciende hacia Sallent de Gállego y el Puerto del Portalet, donde cruzarás de nuevo a Francia.
Aquí comienza una de las jornadas más legendarias de la Transpirenaica: los grandes colosos del Tour de Francia. Primero, el Col d’Aubisque (1.709 m), con vistas imponentes y curvas que serpentean entre las nubes; luego el Col du Soulor, y más adelante el Col du Tourmalet (2.115 m), el puerto más famoso del Pirineo francés, que ofrece un trazado espectacular y vistas de postal.
Continúa por el Col d’Aspin (1.489 m) y desciende hasta Arreau, un pintoresco pueblo francés ideal para pasar la noche.

Día 4: Arreau – Faro de Higuer

Última etapa de la travesía. Desde Arreau continúa hacia el Col de Peyresourde, otro clásico del ciclismo y una carretera de ensueño para las motos, antes de dirigirte hacia Arette y subir el Col de Lié, un paso fronterizo poco transitado pero de belleza excepcional. Cruza de nuevo a España por el Valle de Roncal y continúa por Isaba, Ochagavía y Roncesvalles, atravesando el Pirineo navarro.
Desde allí baja hacia Elizondo y Zugarramurdi, dos pueblos llenos de historia y tradición, para terminar en la costa vasca, donde te espera el Faro de Higuer, en Hondarribia. Allí, frente al mar Cantábrico, podrás disfrutar de la satisfacción de haber cruzado toda la cordillera pirenaica de este a oeste.

Carreteras y conducción

La Transpirenaica combina curvas infinitas, asfalto en buen estado y paisajes de postal. Las carreteras principales como la N-260 y los pasos fronterizos de montaña son el sueño de cualquier motorista. Evita las autopistas y prioriza carreteras secundarias para disfrutar de la conducción y los paisajes.

Dónde dormir y qué comer durante la Transpirenaica

A lo largo de la ruta encontrarás hoteles rurales, hostales de montaña y campings. Muchos pueblos ofrecen alojamiento motero con garaje o espacio para dejar la moto bajo techo. Entre los platos típicos que no te puedes perder:

  • Trinxat de la Cerdanya
  • Quesos del Pirineo y embutidos artesanales
  • Cordero a la brasa o guisos de montaña
  • Pimientos del piquillo en Navarra
  • Y por supuesto, unas buenas tapas típicas del norte.

Recorrer la Transpirenaica en moto es una experiencia única: una travesía completa entre dos mares, atravesando los paisajes más salvajes y auténticos de los Pirineos. Curvas infinitas, pueblos con encanto, pasos de montaña y la satisfacción de cruzar toda una cordillera de este a oeste.
Una ruta que todo motorista debería hacer al menos una vez en la vida.

Bdeviajeros es un proyecto creado por Diana y Albert, una pareja apasionada por los viajes en moto. Iniciaron su aventura en 2019 y desde entonces han viajado por más de 30 países, compartiendo sus experiencias y rutas a través de su blog y canal de YouTube. Su propósito es inspirar a otros a viajar en moto, ofreciendo guías de viaje detalladas, rutas y consejos útiles para los motociclistas. En su blog bdeviajeros.com puedes encontrar información sobre rutas en diversos destinos como Noruega, Escocia, los Alpes, Colombia y diferentes regiones de España, entre otros. También organizan eventos y actividades para la comunidad motera, como la "Bdevuelta". En su canal de YouTube, comparten videos de sus viajes, mostrando no solo las rutas y paisajes, sino también consejos prácticos y experiencias personales:
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