Cada día, miles de niños acuden al centro escolar caminando, en bicicleta o patinete, o en coche con un adulto. Estos desplazamientos rutinarios se convierten en situaciones de tráfico intenso, donde el riesgo de accidente aumenta, especialmente en las horas de salida y entrada de los colegios. En este momento, más que nunca, la seguridad vial en las zonas escolares adquiere una mayor importancia para poder garantizar la integridad de los niños.

En este artículo queremos poner de relieve la importancia de tener una movilidad segura, dando consejos sobre cómo reducir los riesgos y cómo podemos contribuir a una seguridad vial más eficaz. 

Medidas de seguridad vial para peatones

Cuando hablamos de seguridad vial en zonas escolares, uno de los aspectos más importantes es garantizar la protección de los peatones, que en su mayoría son niños. La seguridad de los más pequeños no solo depende de la educación que reciban sobre cómo comportarse en la vía pública, sino también de las medidas de infraestructura y señalización que se implementen en los alrededores de las escuelas.

Como se ha señalado, la educación vial es uno de los pilares fundamentales para prevenir accidentes. Los niños deben aprender desde pequeños las normas básicas de seguridad: cruzar por los pasos de peatones, no correr cerca de la carretera, prestar atención al tráfico antes de cruzar y reconocer las señales de tráfico. 

Además, si estas señales están bien visibles y ubicadas, pueden ayudar tanto a los conductores como a los peatones a identificar las zonas de riesgo. Asimismo, es fundamental que las aceras estén libres de obstáculos y sean lo suficientemente anchas como para permitir el paso seguro de los niños, especialmente cuando se forma una aglomeración de personas. 

En el caso de existir zonas peatonales, estas deben estar claramente delimitadas para evitar que los coches invadan el espacio para viandantes.

Medidas de seguridad vial para bicicletas y patinetes

Cada vez son más los niños que usan este medio ecológico y saludable para acudir al centro escolar. Les permite tener más autonomía, pero también asumen otros riesgos si no se toman las precauciones adecuadas.

Una de las medidas de seguridad más importantes es el uso obligatorio del casco y llevar luces delanteras y traseras. También es recomendable llevar ropa o accesorios reflectantes, con los que sean más visibles, especialmente cuando cae la noche, y llevar un timbre.  

Además de las medidas de infraestructura (carril bici o calles con la velocidad limitada) y equipamiento, es esencial que los niños reciban educación vial. Esto incluye enseñarles a respetar las señales de tráfico, circular por el lado derecho de la calle, usar las manos para indicar cambios de dirección y saber cómo detenerse de forma segura en los cruces. Desde la Fundación RACC se fomenta esta educación con el programa Mou-te bé! Play&Learn, un juego interactivo online que plantea diferentes situaciones de seguridad vial con distintos niveles de dificultad, con el fin de educar a los niños y niñas a moverse por la ciudad sobre las dos ruedas con seguridad.

Medidas de seguridad para los conductores

Una de las medidas más sencillas pero cruciales para garantizar la seguridad de los niños es respetar los límites de velocidad establecidos en las zonas escolares. Los conductores deben estar especialmente atentos a las señales que indican la presencia de una escuela.

Tampoco se debe estacionar en lugares no habilitados (pasos de peatones, entradas de los centros educativos…). Hacerlo no solo bloquea las vías de circulación, sino que también puede impedir que los peatones tengan una correcta visibilidad. 

Asimismo, los conductores deben mantener la distancia de seguridad adecuada para poder reaccionar a tiempo sin causar una colisión en caso de tener que frenar bruscamente. Y recuerda que en los pasos de peatones, los vehículos deben ceder el paso a los que van a pie. 

Además, es esencial evitar distracciones al volante y asegurarse de que todos los ocupantes del vehículo utilizan el sistema de retención adecuado para su edad. 

La seguridad vial en las zonas escolares es responsabilidad de todos. Adoptar medidas preventivas, desde la educación vial hasta el respeto por las normas de tráfico, es vital para proteger a los más pequeños y garantizar que puedan desplazarse de forma segura en su entorno escolar.