
El otoño llega con su aire fresco, colores cálidos y un ritmo más pausado. Es una época de cambio: los días se acortan, la naturaleza se transforma y nuestro cuerpo también lo nota. Entre mantas, paseos y castañas, este mes puede ser perfecto para cuidarte y recargar energía. Por eso es ideal estar preparado para cualquier imprevisto en esta temporada de muchos cambios.
¿Sabías que la bajada de luz en octubre puede influir en tu estado de ánimo?
Con menos horas de sol, nuestro cuerpo produce menos serotonina, la hormona del bienestar. Esto puede generar cansancio o bajón anímico. Aprovechar cada rayo de luz natural, salir a caminar y mantener una buena rutina de sueño son pequeños gestos que marcan la diferencia y ayudan a mantener un equilibrio emocional.
¿Sabías que la castaña es la gran protagonista de octubre en Catalunya?
Rica en fibra, magnesio y hierro, la castaña es un snack perfecto para los días más fríos. Su dulzura natural ayuda a mantener estables los niveles de azúcar en sangre y mejora la digestión.
¿Sabías que respirar aire fresco puede mejorar tu concentración?
En octubre solemos pasar más tiempo en interiores, y eso puede afectar nuestra claridad mental. Hacer pausas para salir al exterior, respirar profundamente y oxigenar el cuerpo ayuda a despejar la mente y reducir la fatiga. Incluso una caminata de 10 minutos puede mejorar tu productividad y bienestar.
¿Sabías que el último fin de semana de octubre cambiamos la hora y pasamos al horario de invierno?
Cuando pasamos al horario de invierno, nuestro reloj interno necesita reajustarse. Es normal sentirse algo más cansado, tener hambre a horas distintas o notar leves cambios en el estado de ánimo. Dormir bien, exponerse a la luz natural y mantener horarios regulares ayuda a reducir estos efectos. También puede ser útil empezar el día con un paseo o desayunar cerca de una ventana para estimular la producción de melatonina y recuperar la energía más rápidamente.
¿Sabías que los colores del otoño también influyen en tu bienestar emocional?
Los tonos cálidos como el naranja, el marrón o el dorado transmiten calma y seguridad. Incluir estos colores en tu ropa o en la decoración de tu hogar puede ayudarte a sentirte más en armonía. El entorno influye más de lo que crees: rodearte de colores acogedores puede levantar tu ánimo.
¿Sabías que una taza de sopa caliente puede ayudarte a combatir el estrés?
Más que una comida, una sopa es un gesto de autocuidado. Las sopas y cremas de temporada reconfortan, hidratan y fortalecen el sistema inmunitario. Además, el simple acto de comer algo caliente y casero ayuda a relajar el cuerpo y a reducir la tensión del día.