
Lo primero, si tienes un escape de agua en casa mantén la calma ya que los nervios no suelen ser buenos consejeros. Hecho esto, toma nota de estos consejos:
1. Localiza de donde sale el agua: es fundamental para poder parar el escape, y luego repáralo.
- Si el origen es en tu casa, cierra la llave de paso que corresponda. Baños, cocinas y lavadoras acostumbran a tener su propio grifo de paso. En caso que no detectes el punto de fuga o no encuentres la llave de paso, cierra la general para cortar todo suministro de agua. Con esto, pararás el primer golpe.
- Si crees que el agua proviene de algún vecino, trata de localizarle para que pueda tomar medidas, o si no le encuentras y el escape de agua es importante, llama a los bomberos.
- Recoge el agua en cuanto puedas: toallas, fregonas…, ayúdate de todo lo que tengas a mano y que sea absorbente para desacerte del agua cuanto antes y que los muebles no sufran demasiado.
- No utilices la instalación ni abras el grifo o la llave de paso general hasta que esté reparada la avería y el escape.
3. Pon solución al problema:
- Antes de llamar al operario, comprueba tu póliza de seguro del hogar o contacta para confirmar qué cobertura te dan en este caso. También puedes acudir a l’asistencia de urgencias en el hogar de Nexdom, donde te atenderán las 24h, incluidos fines de semana o festivos.
4. Notifica los daños:
- Informa a tu aseguradora de los daños en tu casa. Si tienes asegurado el continente, puede que también cubra los daños ocasionados en tus bienes.
- Informa también si el escape de agua a ocasionado daños a otros vecinos.