La escuela barcelonesa de mecánicos e ingenieros de motociclismo y automovilismo cumple un cuarto de siglo, con un método de formación de 360 grados que combina la teoría con la práctica en distintos proyectos deportivos.

Por VALENTÍ FRADERA para Revista RACC

El mundo del Motorsport tiene tres actores básicos: pilotos, ingenieros y mecánicos. Monlau Motul Technical School trabaja desde hace 25 años en la formación integral de sus alumnos, con la colaboración plena del RACC desde el primer día. A lo largo de todos estos años, la experiencia y el saber hacer de la escuela barcelonesa la han convertido en el centro de formación de profesionales del Motorsport líder en Europa.

Todo empezó cuando Pío Ventura detectó que en las carreras no había mecánicos de casa. En los años 80, Ventura había fundado el Centro de Estudios Monlau, una escuela de FP especializada en todas las ramas de la automoción. Armado con esa experiencia docente, en 1997 creó la actual Monlau Motorsport, que inicialmente fue una escuela de mecánicos de competición de motociclismo y, en paralelo, de formación de pilotos.

Dos momentos decisivos

El primer punto de inflexión de Monlau Motorsport se produce en el 2003, cuando arrancan los cursos de mecánica de competición de automovilismo, coincidiendo con el estreno de la nueva sede de la calle Potosí, de Barcelona. Y en el 2010 se inauguran los másteres de ingeniería de
automovilismo y de motociclismo. Estos se imparten desde una segunda sede en Montcada i Reixac, que también es el cuartel general de los departamentos de competición.

Porque, además de una escuela, Monlau Motul es una escudería, un modelo pionero y único en el mundo. Los fines de semana, los profesores de Potosí y el equipo profesional de Montcada se fusionan en las carreras, y se les unen los alumnos en prácticas, ingenieros y mecánicos. Muchos, en las propias escuderías de Monlau (karting, FIM JuniorGP y F4 española); otros, en equipos con los que Monlau mantiene convenios de prácticas. Es un modelo de éxito, en el que la experiencia real en competición se traspasa a las clases.

Monlau Motul aplica los mismos criterios de gestión y desarrollo de talentos con los pilotos, desde sus primeros pasos. Sin ir más lejos, en la parrilla de MotoGP muchos han pasado por las escuderías de Monlau, casi siempre luciendo los colores del RACC: desde Marc y Àlex Márquez hasta Aleix Espargaró y Àlex Rins, pasando por Bagnaia, Quartararo u Oliveira. En la actualidad, Monlau Motul gestiona a jóvenes talentos como José Antonio Rueda (Moto3), Jeremy Alcoba (Moto2) y Mari Boya (F3), todos ellos Pilotos RACC. Gracias a esta labor y a los proyectos deportivos, el modelo Monlau constituye un método circular que se retroalimenta.