Qué hacer para que la alergia no te amargue los viajes en bici o en moto

Por: RACC Blog

Cerrar las ventanillas del coche, instalar filtros antipolen en el vehículo… son algunos de los consejos para evitar que las alergias te afecten al volante. Pero ¿qué ocurre si estás entre los 8 millones de españoles que sufren alergia primaveral y lo tuyo es moverte en bici o en moto?

Tal vez piensas que, sin la protección de un vehículo cerrado, es prácticamente imposible esquivar al maldito polen. Un polen que, año tras año, aumenta su capacidad de provocar reacciones alérgicas debido a la contaminación ambiental, según la Sociedad Española de Alergología e Inmunología Clínica (SEAIC).

  • Para protegerse de la polución, las plantas producen unas proteínas de estrés que acaban provocando que el polen sea más agresivo.
  • Cuando en las ciudades hay un alto nivel de contaminación, además, los pólenes pueden quedarse más tiempo retenidos en la atmósfera, algo que facilita que aparezca lagrimeo, picor en ojos y nariz, goteo nasal, estornudos, tos…, los síntomas típicos de la alergia primaveral.

alergias

10 claves que te lo pondrán más fácil

Cuando vayas en bici o en moto las molestias provocadas por la alergia pueden hacer que disminuya tu atención en la carretera, aumentando el riesgo de accidentes. Para evitarlo, ten en cuenta lo siguiente:

  1. Averigua a qué polen eres alérgico. El alergólogo puede hacerte una sencilla prueba para determinar el tipo de polen que te causa reacción. Esta información te será muy útil para descartar o no posibles zonas por las que transitar.
  2. Consulta los niveles de polen. Analiza la zona por la que quieres desplazarte. La SEAIC ha creado una práctica página web con información precisa según el tipo de polen, la fecha, el área geográfica…
  3. Entre playa o montaña, elige playa. El nivel de polen cerca del mar suele ser menor.
  4. Evita las horas punta. Procura no coger la bici o la moto a primera hora de la mañana o a última de la tarde. La concentración de polen es más alta a esas horas.
  5. Evita también los días más cálidos y secos. En estos días suele haber más polen. Es mejor circular cuando esté nublado y notes humedad en el ambiente.
  6. En bici, cuando puedas, pedalea a favor del viento. Evitarás que el polen que te daña entre en contacto constante con tus ojos, mucosas, manos…
  7. Protege nariz y boca. Las mascarillas con filtro para ir en bici, cada vez más frecuentes en las ciudades, pueden ser muy útiles también para impedir el paso del polen a tu boca y tu nariz. Otra cosa que puede ayudarte es hidratarte los labios con cacao, con lo que reducirás la acción inconsciente de humedecerlos con la saliva (que puede hacer que te tragues el polen).
  8. Lleva gafas de sol. Actúan como una eficaz barrera contra el polen. Si es tarde o está nublado, unas gafas transparentes cumplen la misma función.
  9. Si vas en moto, lo mejor es utilizar un casco integral. Además de proteger contra el polen, es mucho más seguro. Revisa que las entradas de aire estén bien cerradas y lleva siempre la visera bajada. Los que incorporan una pantalla ahumada, además, ayudan a reducir el picor y el lagrimeo de los ojos.
  10. No te toques la cara con las manos ni te frotes los ojos. Lo único que conseguirías haciéndolo es que el polen se extienda aún más. Para aliviar el picor es mucho mejor usar un pañuelo humedecido.

Por último, debes saber que algunos fármacos para combatir la alergia pueden provocar somnolencia o cansancio. Si tienes dudas al respecto, recuerda que la Asistencia RACC te ofrece la posibilidad de consultar a un médico de guardia.